sábado, 12 de julio de 2008

La caja...

Tome la cajita negra en mis manos y la aprisione contra mi pecho, camine hasta el lugar mas alejado que encontre del jardin de mi casa, me puse de rodillas y empece a cavar un pozo, no tan profundo solo el suficiente para cubrir la caja que no media mas que 5 cm. de alto, puse sobre la tierra algunas plantas y me levante dandole la espalda a la pequeña tumba que le erigi a lo que simplemente desconocia, en ese momento no recordaba que era lo que habia dentro de la pequeña caja, un nerviosismo me recorrio la piel y me di la vuelta mientras caminaba dirigiendome de nuevo al lugar donde la habia enterrado, me arrodille de nuevo y empece a excavar con mis dedos llenandome de lodo las manos, pero curiosamente mientras mas excavaba menos encontraba la caja y solo sacaba piedras ovaladas, permaneci buscando enterrando mis manos y ensuciando mi ropa, hasta que finalmente la toque y la saque al instante, estaba lodoza pero intacta, tan fina como lo era, la abri lentamente buscando en su interior, una luz hermosa pero fuerte me ilumino la cara y todo a mi alrededor, mis ojos se encontraron frente a una pulsera de oro con eslabones cuadrados y un nombre en la parte mas plana, senti que habia algo mas y era verdad habia tambien un anillo con un brillante de estrella, lo tome al instante y me lo puse, me quedo justo a la medida, senti que me pertenecia, me puse tambien la pulsera y vi que mi mano habia tenido un gran cambio, ya no estaba enlodada, estaba tan limpia como toda mi ropa, camine en silencio mientras sonreia...
(vaya sueño extraño que tuve, pero dejo una gran paz en mi alma...)

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