Rocié casi toda la loción en el cajón mayor del escritorio que se me asigno... para quitarle el olor a humedad y otras cosas mas que expelía el mastodonte...
Un viejo escritorio de metal con incrustaciones de madera antiquísima... que estaba arrumbado por ahí y con eso de la escases que maneja este nuevo gobierno, pues no hubo otra persona mas a quien dárselo que a mi, ... y no me quejo porque yo lo acepte, pues el que tenia era prestado y en el cambio de oficina tenia que devolverlo o cambiarlo por otro que se adecuara al espacio donde estaría mi nuevo lugar de trabajo...
Si, así es... me cambie de oficina... por varias razones pero la principal fue por el ambiente tosco de trabajo que se vivía en la anterior... el personal de esa área me trataba pésimo, querían hacer verme mi suerte pero como no les seguía el juego les fastidiaba mas mi existencia.
Y mi desicion de cambiarme de Área no fue por darles gusto a las 3 arpías que fingen trabajar ahí, si no por darme estabilidad emocional a mi misma, así que me arme de valor y acudí a mi jefa de departamento para pedirle de favor que me autorizara mi cambio, y ella acepto... si, así de fácil lo acepto porque bien sabia como estaban las cosas ahí y me dio gusto. pues obviamente esta aliada con las arpías... ojala no tarde mucho en llevarse el chasco de su vida cuando conozca la realidad de cada una de ellas, en fin, con este cambio yo tengo mucho mas que ganar...
Ahora me siento mejor, en este nuevo lugar, obviamente también hay roces entre el personal de este lado pero no es conmigo, así que puedo permanecer tranquila y en paz.
Y bueno volviendo al tema de mi nuevo escritorio les diré que tuve que sacudirlo de todo a todo pues había telarañas de sabe cuantos sexenios, esta un poco despintado y tallado de algunos lados, sin dejar de contarles que esta pesadisimo, se necesitaron 3 personas para poder moverlo de lugar, pero lo que me tiene mas preocupada y algo nauseabunda fueron los restos de excremento de algún roedor que seguramente un día tuvo que anidar y crear su dulce hogar para tener a sus crías ahí, dentro del mas extenso de los dos cajónes...
¡Guacala que asco!...
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