La mujer soltó de la mano a su pequeño, quien parecía que venia amarrado y al instante de sentirse libre comenzó a correr por todo el pasillo haciendo el relajo característico de algunos niños...
La contadora gruñona y malhumorada salio de su cueva de ogro apestoso y acomodándose los lentes para ver mejor ordeno con todo lo altanera que la caracteriza que hicieran callar de inmediato a ese niño...
las dos secretarias que la atienden salieron despavoridas dispuestas a volver a amarrar a esa criatura para que se quedara en paz y no molestara a su jefa, pero el chiquillo les gano y les paso de lado escurridizo a toda carcajada creyendo que empezaban a jugar con el, otra de las secretarias de las mas viejillas cascarrabias se levanto de su silla para taparle el paso al niño, pero este con toda habilidad se le paso de largo casi bajo sus pies, burlándose de ella a carcajadas, y gritándole -¡adiós vieja fea¡- entonces se armo un gran alboroto pues el niño corría sin detenerse hasta la oficina principal la de la jefa de jefas... -¿oh no!- va a la oficina de la esposa del lider... gritaban con gran preocupación : -¡deténganlo va a la oficina principal!-... otra mas me grito : -¡has algo! tu que puedes pasara cerca de ti!- la contadora se tocaba la cabeza desesperada porque nadie podía detenerlo, yo mire de reojo a la mama quien ni se inmutaba, ni intentaba hacer algo al respecto, parada en medio del pasillo saboreaba tranquilamente una rosca de pan... entonces la imite, guarde silencio y no me moví de mi lugar, mientras el chiquillo pasaba frente a mi a toda prisa, pero justo antes de que entrara a la famosa oficina principal, enfadada por los demás gritos, con voz fuerte y autoritaria le dije ¡hey niño, si abres esa puerta saldrá la bruja malvada y te partirá en cachitos!... ¡cuidado que te come! le volví a gritar al ver que no se detenía... entonces se paro en seco con la mano aun puesta en el cerrojo de la puerta, volteo a mirarme y yo con cara muy seria le señale que estaba detrás de el, y al instante arranco carrera lloriqueando hasta los brazos de su desobligada madre, quien me miro enojada, abrazo a su chiquillo y se alejo diciendo a grandes voces ¡que era injusto este sistema! que aparte de que no la atendieron bien, les molestaban estos angelitos, -¡esta institución esta para proteger a los niños y ustedes me asustaron al mio pero ya que entre el nuevo Gobernador verán como cambiaran las cosas... todas ustedes saldrán de patitas a la calle, mendigas viejas exageradas, amargadas y no se cuantas palabras mas se fue diciendo porque a cada paso que daba la escuchaba menos...
Y la verdad yo ni me inmute porque entre sus incoherencias también dijo algo de cierto, estas mujeres son unas amargadas, yo solo detuve al chiquillo porque me hizo una seña muy obscena al pasar frente a mi, y porque también me di cuenta que la mujer que le dieron por madre no estaba cumpliendo su papel destinado, si no mas bien era toda una irresponsable pues el aspecto de ambos no era el adecuado, el niño parecía pordiosero aparte del mal olor que traía claramente se veía que lo dejaba hacer lo que le diera la gana y eso a mi me revienta... me chocan los niños malcriados...
Y a la gruñona cuenta números, al igual que a las otras dos cacatúas, por el gran alboroto que hizo el chiquillo se les olvido que la esposa del Lider Constitucional del Estado, la Gran Señora, hoy como casi todas las veces no se encontraba en su majestuosa oficina...
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