La lluvia no deja concentrarme bien... me distrae, quiero escribir algo, pero por minutos prefiero escuchar su torrencial sonido, ese que me pone nerviosa y me hace temblar preparándome para mi huida en cualquier momento...
no se distinguen las gotas esta vez caen como olas chocando entre las rocas... el cristal de la amplia ventana de la habitación donde estoy de repente se cimbra por el tremendo choque del agua... echo un vistazo a mi laptop que tengo montada entre mis piernas, mientras doy un sorbo al liquido frió y oscuro de mi taza de barro que recientemente me compre en una feria... me gusta lo que dice en su grabado ¨Nada es lo que parece¨... de alguna manera me identifico... yo suelo ser así... parezco algo que no es nada... y aveces si soy ese nada que parece algo que realmente no lo es... ¿me explico?... ok... no importa de cualquier modo...
anoche mientras charlaba con mi nueva compañera de habitación ella tocaba guitarra y yo escribía... si... y aun así charlabamos... entre música y letras... charlabamos quedito... ambas imitando una voz que despertaba pasiones... de esas que permiten abrirse a tu alma... y de repente mi mente vagaba ... hacia atrás... recordando sucesos sin importancia, vanos... entre su música y mi escritura, le inventaba agonías, de esas que son lo que no parecen... y ella sonreía... sonreía y se le escapaban melodías...
-estudiare filosofía-
me dijo de repente haciendo a un lado mi guitarra con tan poco cuidado que casi se la arrebato
-¡cuidado!- si me la quebras te asesinare... esa guitarra lleva conmigo casi 18 años... es uno de mis grandes tesoros materiales-
le dije preocupada, ella me observo y me dijo muy seria
-los tesoros tan personales no se comparten-
-eso pienso yo también, pero no suelo ser tan materialista... las cosas vienen y van... -
-entonces tírala y comprate otra... -
me dijo levantándose de un salto del sillón dirigiéndose a la ventana, yo la observe un minuto... mientras tocaba las cuerdas de mi guitarra...
-parece que volverá a llover... en este estado llueve muy seguido... pero no creo que permanezca aquí por mucho tiempo... yo amo el mar y me fascina tanto la lluvia...-
me dijo, yo no respondí... pero intente cantar...
-¿quieres café?-
pregunto interrumpiéndome mientras acercaba una taza con ese liquido hirviendo hacia a mi...
--no... yo odio el café, me espanta el mar y aveces también le temo a la lluvia... pero mas a los líquidos hirviendo... no me gusta lo caliente, prefiero lo frió-
le dije, ella me observo sonriendo
-somos tan diferentes... pero me caes tan bien aveces-
me dijo... la ignore y seguí tocando y ella se puso a escribir... y continuamos cantando...
Con sombrero de ala ancha un clavel en la solapa
y una flor... se hizo a la mar...
eres la otra España la que huele a caña, tabaco y brea...
eres la perezosa la de piel dorada...
la marinera...
¡oh! ¡oh! !oh¡... marinera...
¿Viste como ¨Nada es lo que parece¨?...
